El salón

-¿Gracias? -Le digo riendo.-¿Es bueno o malo?

-No sé, es el primer corazón que me pongo a escuchar con detenimiento - le digo apartando la vista de él para mirar sin interés alguno la televisión

-Me lo tomare como un cumplido.-Le digo sonriendo.

-¿Cómo es que te criaste con vampiros? - pregunto curiosa

-Bueno, por ahora no puedo hablar mucho de eso pero algunos de mis familiares lo son.-Le explico pensativo.

Asiento levemente
-Por eso te lanzaste en picado a por la vampira morena ¿no? - le digo en tono de burla - Como tu eres rubito, para la mezcla - digo tocándole el pelo con lo de rubio

-Por supuesto, necesito vampiras en mi vida.-Le digo riendo.

-Pues no deberías quererlo - le digo poniendome seria separándome un poco de él - No entiendo cómo puedes estar tan sereno a mi lado, no lo entiendo - digo desconcertada mirándole

-Alice se que la mayoria de los humanos os rehullen, os tienen miedo, pero yo no soy como el resto.

-Eso es lo que me asusta. Que estés tan cómodo a mi lado que te creas que soy humana, cuando cinco horas de ocho pienso en comerte - le digo dándole un beso en la mejilla

-Pero no se me olvida que eres vampira, es simplemente que se estar con vampiros.-Le digo sonriendo.-Uy, ¿y las tres que sobran?

-Pienso en que me gustas demasiado. Más de lo conveniente - le confieso apoyando mi mentón en su hombro

-Eso es mejor que pensar en comerme.-Le digo sonriendo y la beso rapidamente.

-¿Tú en qué piensas? - pregunto curiosa

-En que deberias preocuparte menos. -Le digo sonriendo.-Yo creo que si no pensaras tanto, incluso tendrias menos interes en comerte a todos.

-Puede ser, no lo había pensado...-murmuro en su oído

-Por supuesto, si no paras de pensar en algo, al final quieres hacerlo, por eso si no piensas en comer quizas te controles.-Le digo sonriendole.

-¿En qué piensabas tú qué sabes cómo funciona esto? - le pregunto sonriendo con interés

-Mis pensamientos son muy complicados para ti.-Le digo sonriendo poniendole el dedo en su frente.

-¿Por qué? - pregunto extrañada dándole un beso en el hombro

-Por que pienso en mas cosas aparte de comer.-Bromeo acariciandole el pelo.-Ya iras comprendiendome.

-¿En qué piensas entonces? - pregunto acercándome más para darle un beso en la comisura del labio

-Ahora mismo, en besarte.-Le digo siguiendole el beso.

Le pongo un dedo en los labios para que pare
-Aquí no - le digo sonriendo mientras apoyo mi cabeza en su hombro

-¿Ahora te pones timida?-Le digo riendo.-Como quieras.